Gracias.
Por ser como la brisa,
suave en la mañana.
Por decir sin miedo,
lo que piensas o te preocupa.
Por pensar que un sueño,
puede hacerse realidad, juntos.
Por encarar la vida,
siempre hacia adelante.
Por ser tu misma,
y no cambiar.
Gracias.
Por tu espera,
silenciosa a veces.
Por tus miradas,
calidas y sonrientes.
Por tus susuros,
que tanto dicen, y nada callan.
Por tus caricias,
inolvidables en mis sueños.
Por tus besos,
que predicen mis noches contigo.
Por nuestros paseos,
inacabables y deliciosos.
Por permitirme abrir mi corazón,
colmandolo de tanta felicidad.
Gracias por dejarme
decirte gracias.
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